Brennero es la puerta que conecta Italia con el mundo alemán, tanto hoy en día como hace mil años, cuando los fieles se dirigían a Roma, centro de la espiritualidad cristiana.
El itinerario de los peregrinos de Roma después de haber atravesado la región alpina entra en Véneto desde Valsugana y atraviesa la llanura a lo largo de la densa red de ríos y canales que en su momento fueron navegables entre Bassano del Grappa, Padua, Rovigo y el Po.
Una etapa tras otra, el itinerario discurre tocando, entre las otras ciudades, Ravenna, Arezzo, Viterbo y Roma.
La credencial y el testimonium
Cada Camino tiene una credencial que da testimonio del estado de peregrino.
En este documento de viaje entregado por las Asociaciones que gestionan los Caminos, se muestran lugares y fechas de salida y de llegada y los sellos de las iglesias y de los lugares de espiritualidad a los que se ha llegado.
Completar la credencial da derecho a retirar el testimonium, sello que certifica la conclusión de la peregrinación.