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La Ruta de los Vinos del Montello y de las Colinas de Asolo
Detalles de la ruta Punto de salidaPossagno Punto de llegadaMontebelluna
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El recorrido comienza en Possagno, donde os sugerimos visitar el templo neoclásico, la Gipsoteca Canoviana y la casa natal de Antonio Canova, célebre escultor.

Se prosigue en dirección desde Castelcucco hacia Asolo entre colinas, viñedos, prados y bosques. Además del paseo en el centro histórico, el turista puede visitar el Museo Cívico que acoge secciones dedicadas a personajes oriundos de Asolo: la reina Cornaro, Eleonora Duse, Freya Stark, Robert Browning.

Desde Asolo el recorrido nos conduce hacia Maser, donde se debe visitar la Villa Barbaro, obra maestra de Palladio, realizada en 1557 y símbolo del renacimiento véneto. Los atractivos arquitectónicos continúan en Cornuda, con las elegantes mansiones patricias: Villa Bolzonello, Villa Viviani, Villa Bettis, y los palacios Munari y De Faveri-Tron. Acercándonos al río Piave se encuentran los sitios testigo de las trágicas vivencias de la Primer Guerra Mundial, como Cippo degli Arditi de Crocetta del Montello.

El itinerario continúa en dirección de Montebelluna, centro mundial del calzado deportivo y ciudad "Amiga de la bicicleta". Se sugiere visitar el Museo de Historia Natural y Arqueología de Villa Biagi. Los amantes de la naturaleza podrán continuar con los descubrimientos recorriendo el Stradon del Bosco, que bordea al Montello.

Entre marzo y abril, las colinas de Maser se tiñen de blanco por la vaporosa floración de los cerezos. A finales de mayo, en el mercado triunfan las sabrosas “roane” o las “sandre”, exhibidas en la tradicional Muestra Regional de la Cereza, que se lleva a cabo en el majestuoso escenario de Villa Barbaro. Es corta la temporada de las cerezas, por supuesto. Pero el color y el aroma de las de Maser son muy difíciles de olvidar.

La ciudad de Asolo, llamada "de los cien horizontes", descansa sobre antiguos asentamientos romanos y se desarrolló en el período medieval alrededor de una fortaleza defensiva. En el siglo XVI, Asolo vivió un período de gran esplendor gracias a Caterina Cornaro, la reina de Chipre que vivió durante mucho tiempo rodeada por una espléndida corte renacentista. Además del paseo por el centro histórico, el turista puede visitar el Museo Cívico, que alberga una cuidada sección arqueológica y una rica pinacoteca, con secciones dedicadas a los personas asolanos: la reina Cornaro, Eleonora Duse, Freya Stark, Robert Browning.