Portogruaro

Los reflejos del río Lemene y las antiguas y valiosas arquitecturas

Como gran parte de los lugares y de las bellezas del interior veneciano, Portogruaro es un tesoro que merece la pena descubrir. La localidad está atravesada por el río Lemene y esconde en cada esquina rincones interesantes que revelan semejanzas con la vecina Venecia. 

Su peculiar estructura urbana conserva intacta la disposición medieval en el centro de la localidad y en sus antiguos edificios. Asimismo, la muralla del siglo XIII y los numerosos palacios de estilo gótico italiano y renacentista representan fascinantes testimonios de los diversos momentos históricos que han marcado esta localidad.

En la Plaza de la Repubblica, se asoma el Palacio Municipale del siglo XIV, considerado el monumento medieval más importante presente en Portogruaro. Al lado se encuentra el elegante pozuelo de las grullas, considerado uno de los símbolos del lugar, con dos graciosas grullas de bronce que sirven de ornamento. Las dos calles principales con pórtico, Corso Martiri della Libertà y Via Seminario, albergan típicos talleres, cafeterías y fondas donde los habitantes de la localidad suelen encontrarse con una copa de buen vino producido en la zona de Lison-Pramaggiore.

Merecen una visita los Molinos de Sant'Andrea en el Lemene, el vecino Oratorio de la Madonna della Pescheria y los numerosos edificios religiosos que albergan obras de arte de gran valor. Entre ellos, destaca el Duomo o Catedral que custodia algunas pinturas de Palma el Joven y de su escuela. Resulta interesante el Museo Nacional Concordiese que recoge hallazgos de la época romana y paleocristiana provenientes en su mayor parte de la vecina Concordia Sagittaria.


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