A los pies de los montes Lessini, en el corazón del valle excavado por el río Alpone, la localidad de Bolca ofrece un viaje fascinante y emocionante atrás en el tiempo para toda la familia. 

Aquí, en Lessinia, hace cincuenta millones de años, había un cálido mar habitado por peces, moluscos, algas... organismos vertebrados e invertebrados que las capas del subsuelo de Bolca han guardado celosamente, lo que hace que esta localidad sea única en el mundo, tanto que ha sido declarada "capital mundial de los fósiles de la Era Terciaria" (hace unos 50 millones de años). Vale la pena visitar el museo de los fósiles local que conserva el fascinante "pez ángel", el orgullo de la colección.

 Entre los sitios de hallazgos fósiles, el más famoso es, sin duda, la Pessàra que se encuentra en la localidad de Zovo, a las afueras de Bolca. Se trata de un túnel excavado en el que vieron la luz en un extraordinario estado de conservación decenas de miles de fósiles de peces, de plantas y de invertebrados. Para aquellos a los que les gusta caminar, la Pessàra es fácilmente accesible gracias a la "caminata paleontológica" que desde el centro de Bolca baja hacia las excavaciones y permite descubrir los diferentes fenómenos geológicos.

Para continuar la ruta y encontrar otro extraordinario patrimonio hay que llegar a Roncà, localidad a los pies del Monte Calvarina. Aquí está el nuevo Museo de Paleontología que ofrece un amplio panorama de la fauna y flora de la Lessinia de hace más de 40 millones de años. Los fósiles expuestos, provenientes del yacimiento del Valle Negro, el actual Valle de las Iglesias, son resultado de más de 200 años de estudio e investigación. Destaca entre todos el esqueleto y la reconstrucción de un gran Prototherium, un animal de la familia de los sirenios, mamíferos marinos de tamaño medio-grande.