Foto archivio Giardino Valsanzibio
Jardín monumental de Valsanzibio

Foto archivio Giardino Valsanzibio
Detalles del itinerario. Periodo recomendado Primavera, Verano, Otoño Teléfono+39 340 0825844
Para acceder al laberinto, es necesario adquirir una entrada adicional

En Galzignano Terme, provincia de Padua, se encuentra uno de los jardines de época más impresionantes de Europa: El Jardín histórico de Valsanzibio. Inmerso entre las suaves líneas de las Colinas Euganeas, este espléndido parque fue construido en el siglo XVII por iniciativa de la familia Barbarigo, y actualmente brinda un entorno verde a la Villa Barbarigo Pizzoni Ardemani

Aquí el arte y el ingenio humano se mezclan hábilmente con la belleza de la naturaleza: estatuas barrocas de piedra de Istria, esculturas menores y arquitectura se unen a  estanques, cascadas y fuentes en un torrente de olas y chorros de agua. Al explorarlo, encontrarás decenas de plantas arbóreas: tejos, magnolias blancas y secuoyas importadas hace siglos directamente desde el “Nuevo Mundo”, y también coníferas, cedros y setos de boj que llegan a alcanzar los seis metros. Y si esta altura no te termina de sorprender, debes saber que el boj, para alcanzar la «estatura» actual del árbol, tuvo que ser plantado hace trescientos años.

Después, descubrirás que el jardín fue diseñado originalmente como un camino simbólico, un viaje de redención que recuerda a la Comedia Dantesca: desde el portal de Diana se llega hasta la escalera del soneto por un camino que conduce al hombre del error a la verdad. Hoy en día, podrás desafiar al sentido de la orientación y superar los muchos obstáculos que encontrarás en el trayecto, recorriendo el laberinto centenario de setos, uno de los más antiguos y mejor conservados del mundo. Una vez que hayas superado los siete caminos trampa (siete como los pecados capitales), llegarás a la cima de una torre desde la que obtendrás, simbólicamente, una visión más clara de tu vida.
En la antigüedad, el camino de la purificación comenzaba en el Pabellón de Diana. El portal de la diosa de la caza fue, de hecho, la entrada principal de la residencia de campo de los Barbarigo. En el pasado, los barcos llegaban hasta aquí directamente desde Venecia, atravesando el valle de Santo Eusebio (de donde deriva la contracción “Valsanzibio” que hoy da nombre al pueblo).