Un Museo para contar la Historia a partir de una multitud de historias, microhistorias, cuentos pequeños fragmentos, anécdotas, pedazos de memoria, capaces de recomponer juntos una narración coral en su primer conflicto mundial, dar voz no solo a los grandes gestos de los héroes sino más bien a los pequeños gestos cotidianos de la locura ordinaria, a la absurda normalidad de la guerra.
Un Museo, donde el verdadero desafío no es el de “explicar” sino el de “contar”, gracias a la evocación: se han seleccionado piezas y documentos para centrar la atención en detalles significativos únicos, evitando un amontonamiento que lleve a confundir las emociones y la comprensión por parte del visitante.
La distribución está pensada para ensalzar y valorizar completamente el tema en cuestión y al mismo tiempo preservar los aspectos históricos más importantes del museo original. El uso combinado de formas, luces, sonidos, colores, materiales, imágenes fijas y en movimiento ha explotado el conjunto de los lenguajes y de las herramientas ofrecidas por los multimedia, permitiendo que el nivel cognitivo y el nivel emocional sean capaces de convivir e integrarse en un único gran plano narrativo.
El Museo ofrece varias iniciativas con el fin de explorar las causas, los acontecimientos y las consecuencias de la I Guerra Mundial a través de objetos y documentos escritos.